En un país muy lejano, donde se soplan las velitas en una milanesa, el hada Caramba les estaba leyendo a los hermanos Lucero una gran historia.
Lucía y Luciano seguían atentamente los pasos de esa leyenda que se titulaba: "Cómo hacer una torta".
-Por último, se mete al horno durante cuarenta minutos a temperatura moderada y listo. Colorín colorado espero que no se haya quemado.
El hada cerró el libro de recetas y sopló suavemente sobre su tapa. Su magia hizo que desprendiera el aroma de las tortas recién horneadas. A los hermanos Lucero se les hizo agua la boca y Lucía preguntó:
-¿Por qué ya no se hacen tortas?
Con tono misterioso el hada Caramba respondió:
-Porque hace cien años hubo una gran pelea entre los reyes de los ingredientes.
-¿Quiénes? -inquirió Luciano.
-Los reyes de la harina, los huevos, la leche y el azúcar -aclaró el hada.
Los hermanos se miraron y gritaron:
-¡Hagamos una torta!